Por: Mario CASTELLANOS ALCAZAR
ROSARIO ROBLES CONTRA VIDEGARAY
Cierto es que el combate a la corrupción y la impunidad, eje motor del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en el rubro de la impartición de la justicia, se está convirtiendo en un manipuleo político, en el caso de Rosario Robles Berlanga, quien está solicitando a la Fiscalía General de la República, se le conceda el derecho de ser testigo colaborador para limpiar la imagen del ex presidente de México, Enrique Peña Nieto y del ex Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, así, como lograr su libertad.
Berlanga es acusada por la “Estafa Maestra”, por más de cinco mil millones de pesos, privada de su libertad en el reclusorio de Santa Martha Acatitla, por el hecho de no impedir o denunciar el fraude al erario público, sin embargo, tiene dos imputaciones más: delincuencia organizada y lavado de dinero, que la tienen preocupada, además de enferma, por lo que trata de tener la oportunidad de ser testigo colaborador.
Eso, sí, todo parece indicar que el chivo expiatorio será el Ex Secretario de Hacienda y Crédito Público y de Relaciones Exteriores en el gobierno de Enrique Peña Nieto, Luis Videgaray, como operador de los recursos financieros que se destinaron las campañas electorales de los candidatos del PRI en los años 2012, 2015 y 2018.
La misma ex Secretaria de Desarrollo Social y de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano, Rosario Robles, ha manifestado que no va a acusar a Peña Nieto ni Miguel Ángel Osorio Chong, quienes fueron involucrados en la “estafa maestra”, por el ex Oficial Mayor de dichas Secretarías, Emilio Zebadua, quien responsabilizó directamente a Rosario Robles.
Es aquí en donde brinca, Rosario Robles, al manifestar que Peña y Chong son inocentes, impecables e incorruptibles, que, no se merecen ser imputados y por supuesto, limpiará la imagen de estos, en las declaraciones judiciales, de ser aceptada su solicitud de testigo colaborador, aprovechando la oportunidad para lograr su libertad caucional. Sin embargo, se advierte que la flecha va contra Luis Videgaray, a quien acusó, el abogado de Robles Berlanga, Sergio Arturo Ramírez, de ser el operador de los recursos económicos destinados a las campañas del PRI, incluso, del candidato presidencial en el año 2018, José Antonio Meade.
Por ahí va la madeja del hilo, toda vez, que el ex director de Petróleos Mexicanos, (PEMEX), Emilio Lozoya, en sus declaraciones como testigo colaborador después de ser encarcelado en España y repatriado a México, había acusado a Videgaray de tener nexos muy cercanos y por supuesto operador de los recursos que la empresa brasileña Odebrecht, entregó al gobierno mexicano- diez mil millones de pesos- para las campañas electorales y la compra de votos en favor de los candidatos del PRI.
El costo político para el gobierno de la Cuarta Transformación de México, será de funestas consecuencias, que lejos de combatir la corrupción y la impunidad, se fomentarán, por el hecho de estar jugando con la aplicación de la justicia, a los políticos corruptos, con la nueva modalidad de testigos colaboradores, que sí, bien, está estipulado en las leyes mexicanas se presta a un juego sucio y manipuleo político de acuerdo a los intereses del gobierno en turno.
Tal es el caso de Rosario Robles Berlanga, encarcelada en el penal de Santa Martha Acatitla, el 13 de agosto del año 2019, por los delitos de omisión, por el hecho de no evitar o denunciar la escandalosa “Estafa Maestra” con un fraude de más de cinco mil millones de pesos en la triangulación de estos recursos a instituciones federales y universidades del país.
Esto, cuando fungió como Secretaria de la SEDESOL, y SEDATU, en la administración del entonces presidente de México, Enrique Peña Nieto (PRI), quien ya tenía conocimiento del fraude los recursos públicos, teniendo como intermediario a Luis Videgaray, ex Secretario de Hacienda y Crédito Público y de Relaciones Exteriores, sin embargo, lo siempre dicho, por Peña Nieto, era, lo cierto es que a un año y tres meses de estar en prisión, Robles Berlanga, quien había rechazado la oferta de ser testigo colaborador, en un principio, para quedar en libertad o arraigada en su domicilio, solo tendría que denunciar a los autores intelectuales de la “Estafa Maestra”, según, no
aceptó, porque le era leal al presidente Enrique Peña Nieto y al Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, a quienes les sigue siendo fiel, ahora está pidiendo a gritos a la Fiscalía General de la República, le dé esta oportunidad, porque ahora sí, está decidida a cantar, es decir, denunciará a los autores intelectuales de la referida estafa maestra, pero , no a estos, sino todo indica que va por la cabeza de Luis Videgaray.
Incluso, los defensores de Rosario Robles, Sergio Arturo Ramírez y Epigmenio Mendieta, están haciendo los trámites ante la Fiscalía General de la República, para que se le conceda el derecho de ser testigo colaborador al igual que se le concedió al ex director de Petróleos Mexicanos (PEMEX), Emilio Lozoya Austin, quien estuvo encarcelado en España por los delitos de corrupción y lavado de dinero en el caso de empresa Odebrecht por operar los recursos- 10 mil millones de pesos con fines fraudulentos.
Sin embargo, un factor negativo, por lo que la FGR podría negar a Rosario Robles Berlanga, el derecho de ser testigo colaborador para así lograr su libertad condicional, arraigada en su domicilio, es que ya puede ser tarde, porque además ya fue imputada con dos causas más, que agravan su situación, por estar involucrada en la delincuencia organizada y lavado de dinero, por lo que podría alcanzar hasta 40 años de prisión y sin derecho a fianza.
Asimismo, porque la figura jurídica de testigo colaborador ya se está manoseando, además, se presta a incurrir en caprichos y más actos de corrupción, al delatar a personajes con un criterio de revanchismo político, como puede ser el caso de Rosario Robles, quien ya tiene la consigna de lavar el prestigio del ex presidente de México, Enrique Peña Nieto y del ex Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, de quienes hablará lindezas, que son incorruptibles, entonces, para que otorgarle la prerrogativa de ley, que solicita, sino va a cumplir con las consignas del presidente López Obrador, quien quiere pruebas en contra de los ex presidentes de México.
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